Tasar una vivienda es la mejor forma de conocer el precio de mercado del inmueble, en un momento concreto. Cuando una persona va a pedir un préstamo hipotecario para comprar una casa, el banco exige una tasación oficial para comprobar que hay una equivalencia entre el importe que está solicitando el cliente y el valor real del bien que desea adquirir.
Esto hace que la tasación suela entenderse como una acción que le corresponde al comprador. Sin embargo, también el vendedor puede llevar a cabo el procedimiento. Esto le permitirá saber cuánto puede pedir por su casa, lo que le facilitará la venta al ajustar el precio a las condiciones del mercado.
¿Hay que tasar una vivienda de forma oficial para venderla?
No necesariamente. La tasación que pide el banco al comprador es de carácter oficial y llevada a cabo por una entidad acreditada por el Banco de España. En el caso del vendedor, no existe tal obligación. No obstante, nada impide que acuda a este procedimiento.
Lo que suele hacer el vendedor es ponerse en manos de expertos inmobiliarios para que estos le proporcionen un valor aproximado. Una cifra que refleja lo que el mercado considera un precio justo por una casa de esas características.
En algunos casos, incluso se puede hacer la tasación directamente online. Muchas plataformas inmobiliarias ya cuentan con un software específico que ofrece una respuesta en apenas unos minutos. Basta con indicar datos básicos de la vivienda como año de construcción, barrio en el que está ubicada, o fecha de la última reforma.
¿Qué se tiene en cuenta en la tasación?
Al tasar una vivienda se presta atención tanto a las características del propio inmueble como a las características de la finca en la que está ubicada y del barrio del que forma parte.
De ahí que al tasador le interese conocer los siguientes datos:
- Fecha de construcción y de la última reforma de entidad.
- Superficie útil de la vivienda y distribución de la misma.
- Calificación energética (tener el certificado energético es obligatorio para poder realizar la venta).
- Estado de la finca en la que está la casa.
- Ubicación dentro del municipio. Para evaluar cuestiones como la cercanía de transporte público, colegios y otras dotaciones públicas y privadas.
- Precio medio de viviendas similares vendidas en la zona en los últimos meses.
Con toda esta información, el tasador puede emitir una opinión cualificada sobre cuál es el precio de mercado del inmueble.
Es recomendable tasar la vivienda para venderla
El vendedor no tiene la obligación legal de tasar su casa antes de ponerla en venta, pero sí puede resultarle muy útil. Así puede pedir una cantidad que se amolde a lo que los potenciales compradores están dispuestos a pagar.
Por otro lado, al contar con una tasación, el comprador tiene menos opciones a la hora de negociar el precio a la baja.
Lo que sí hay que tener en cuenta es que el valor de mercado tienen un carácter temporal, va variando con el tiempo. De ahí que sea importante tasar una vivienda justo antes de ponerla a la venta, para que el precio esté más apegado a la realidad de ese momento. ¿Está pensando en vender su casa? Podemos ayudarte con los trámites legales.