Conciliación laboral

¿Qué es la conciliación laboral?

La conciliación laboral es un procedimiento extrajudicial de resolución de conflictos, en el que intervienen el empleado y la empresa con el objetivo de llegar a un acuerdo antes de que se inicie el proceso judicial.

¿Cuándo es necesario recurrir a la conciliación laboral?

Este acto es obligatorio en las reclamaciones más habituales, como despidos, sanciones, indemnizaciones o reclamaciones de cantidad.

¿Cómo iniciar el acto de conciliación?

El inicio de la conciliación laboral comienza con la solicitud del acto en el Servicio de Mediación, arbitraje y conciliación (SMAG), por parte del empleado.

Es importante tener en cuenta que la conciliación laboral se realiza previamente a la presentación de la demanda por lo que hay que conocer los plazos concretos para realizar las gestiones en plazo. Durante el proceso de conciliación se interrumpe el plazo desde la presentación de la papeleta hasta la resolución de la conciliación, momento en el que se reactiva el plazo restante.

Existen diferentes plazos según el caso:

• 20 días hábiles para despidos y sanciones
• 1 año para reclamaciones de cantidad e indemnizaciones

Plazos a contar desde la entrega de carta de despido o desde el hecho causante.

¿Cómo puede acabar el proceso de conciliación?

• No se presenta el empleado: en este caso se archiva la papeleta de conciliación. Si el empleado desea seguir con la conciliación deberá empezar nuevamente el proceso, siempre que esté en plazo.
• Con avenencia: Es el caso en el que se ha llegado a acuerdo entre empleado y empresa.
• Sin avenencia: En este caso no se ha llegado a acuerdo, por lo que el empleado puede presentar la demanda ante el Juzgado de lo social.
• Intentada sin efecto: la empresa no se presenta en la conciliación