Abogados herencias: cuentas bancarias de fallecidos

¿Cómo accedemos a las cuentas bancarias de fallecidos? Cuando fallece un familiar, normalmente acudimos a la sucursal bancaria habitual del mismo para disponer del saldo de su cuenta, la sorpresa llega cuando nos dicen que el saldo está bloqueado a la espera del cumplimiento de algunos requisitos formales.

El primer paso a seguir es comunicar a la entidad bancaria el fallecimiento del familiar. Acto seguido la entidad bloqueará sus cuentas a la espera de que les notifiquen quienes son sus herederos legítimos y quedar a la espera de que realicen el pago del Impuesto de Sucesiones.

Si en la cuenta bancaria existe una cotitularidad (por ejemplo, la cuenta de un matrimonio), se bloqueará la mitad del saldo, ya que se presume, salvo prueba en contrario, que pertenece por partes iguales a los cónyuges.

Cuando fallece el titular se extinguen los poderes otorgados por el mismo, lo que conlleva que los autorizados pierdan sus facultades de disposición y no podrá exigir que se le reintegre ninguna cantidad.

Por todo ello, para poder disponer del saldo de la cuenta, es necesario realizar los siguientes pasos:

  • En primer lugar, entregar a la entidad bancaria el testamento del fallecido, además de entregar documentos complementarios como pueda ser la aceptación de la herencia o el cuaderno particional, ya que los mismos justifican la titularidad de los herederos sobre los bienes que reclaman.
  • También es necesario presentar el cumplimiento del impuesto de sucesiones y donaciones. Este paso es obligatorio dado que la entidad es responsable subsidiaria de las obligaciones de sus clientes como contribuyentes en el caso de que no abonen la cantidad estipulada del impuesto conforme a sus propias características.

Tanto si quieres acceder a cuentas bancarias de fallecidos o cualquier otro trámite relacionado con las herencias o sucesiones, en el bufete de abogados Le Morne Brabant encontrará a los mejores abogados herencias y sucesiones de Madrid, Valencia y Alicante. La primera consulta es gratuita.

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