El derecho a la igualdad entre mujeres y hombres está reconocido en la Declaración Universal de Derechos Humanos. En su artículo 2 dispone que todas las personas tienen los mismos derechos y libertades, sin hacer distinción por raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición. Este principio ha sido recogido en la legislación española, ¿pero realmente existe una igualdad efectiva entre mujeres y hombres en la actualidad? En este artículo intentaremos responder a esta pregunta.
El derecho a la igualdad entre mujeres y hombres en la legislación española
La igualdad entre mujeres y hombres ha sido consagrada en la Constitución Española. En concreto, se reconoce como un derecho fundamental en los siguientes artículos:
En el artículo 9 de la Constitución española que establece que los poderes públicos promoverán las condiciones para que la igualdad y la libertad de los individuos y de los grupos en los que se integran sean realmente efectivas, removiendo los obstáculos que dificulten o impidan su plenitud, facilitando la participación de todos los ciudadanos en la vida económica, política, social y cultural.
Y en el artículo 14 de la Constitución española establece la igualdad de todos los españoles ante la ley, sin que pueda prevalecer ningún tipo de discriminación por razón de nacimiento, sexo, raza, religión, opinión ni ninguna otra circunstancia o condición social o personal.
Por otra parte, La Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, tiene como fin desarrollar los preceptos constitucionales. En la actualidad, se ha creado el Ministerio de Igualdad, cuyo objetivo es impulsar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
¿El derecho a la igualdad entre mujeres y hombres es realmente efectivo?
Pese a que a nivel legal se ha instaurado la igualdad entre mujeres y hombres, en la práctica sigue habiendo mucha desigualdad. La discriminación de la mujer se manifiesta principalmente a nivel laboral, familiar, cultural y social. Esta discriminación puede observarse cuando hay ante circunstancias similares hay una diferencia entre el trato que recibe un hombre y una mujer. El ejemplo más claro se produce en el ámbito laboral, tanto respecto a la ocupación como por la brecha salarial. Actualmente, las mujeres tienen una tasa de actividad 13,1 puntos inferior a la de los hombres y su actividad se concentra en ocupaciones de baja cualificación. Además, la brecha salarial sigue siendo enorme. Las mujeres perciben por hora trabajada una remuneración un 15,3% inferior a la que recibe el hombre por la misma actividad.
Para conseguir el derecho a la igualdad entre mujeres y hombres es necesario seguir avanzando en la lucha contra la discriminación por razón de género, promoviendo políticas de conciliación de la vida familiar, personal y laboral. También es imprescindible la implicación de toda la sociedad en el fomento de la igualdad de oportunidades de mujeres y hombres en todos los ámbitos, principalmente en la educación, el empleo y el emprendimiento.
¿Y, tú, has recibido algún tipo de discriminación en el trabajo por razón de género? En Le Morne Brabant podemos ayudarte. Nuestro despacho cuenta con abogados especializados en la materia que asumirán la defensa de tus derechos para que consigas la mayor igualdad en tus condiciones en tu trabajo.