Cuando una pareja con hijos decide separarse o divorciarse, una de las principales preocupaciones es la custodia de los menores. Sin embargo, en los últimos años, las mascotas se han convertido en miembros fundamentales de muchas familias, y las disputas por su cuidado no son poco comunes. La legislación española ha avanzado en este tema, y desde la Ley 17/2021, los animales de compañía se reconocen como «seres sintientes», lo que implica que su bienestar debe ser considerado en cualquier acuerdo o sentencia judicial.
¿Qué implica el reconocimiento de los animales como "seres sintientes"?
Hasta hace poco, las mascotas eran tratadas como bienes o propiedades en los procesos judiciales, lo que dificultaba la resolución de disputas sobre su custodia. Con la reforma legal, los animales de compañía tienen un estatus especial que permite que los jueces consideren su bienestar y se puedan dictar acuerdos similares a los de la custodia compartida de hijos menores
¿Qué pasa con la custodia de las mascotas en caso de divorcio o separación?
El tribunal puede establecer un régimen de tenencia compartida de las mascotas si ambos miembros de la pareja han sido corresponsables de su cuidado. Esto significa que, al igual que con los menores, las mascotas pueden pasar tiempo alterno con cada uno de los cuidadores, y cada parte deberá hacerse cargo de su manutención durante los periodos en los que el animal viva con ellos.
El acuerdo puede incluir detalles como:
- Periodo de custodia compartida: alternancia semanal, quincenal o mensual.
- Reparto de gastos: alimentación, veterinario y otros gastos asociados.
- Condiciones especiales: como si el animal necesita cuidados específicos (medicación, paseos, etc.).
¿Y si uno de los ex cónyuges incumple el acuerdo de custodia de la mascota?
Si se incumple el acuerdo, la parte afectada puede solicitar la ejecución judicial del mismo. En algunos casos, como se ha visto en la reciente jurisprudencia, los jueces pueden conceder incluso indemnizaciones por daños morales al cuidador que haya sido privado de tiempo con su mascota si se demuestra que el incumplimiento ha sido injustificado y ha causado un daño emocional significativo.
¿Y si uno de los ex cónyuges incumple el acuerdo de custodia de la mascota?
- Documenta la propiedad y los cuidados: Aunque la mascota pueda estar registrada a nombre de uno de los miembros de la pareja, es importante tener pruebas de que ambos han contribuido a su cuidado (facturas veterinarias, alimentación, etc.).
- Acuerda los términos de la custodia lo antes posible: Un acuerdo amistoso puede evitar tensiones innecesarias y asegurar que la mascota sigue recibiendo los cuidados necesarios.
- Considera el bienestar del animal: Como en los casos de menores, el bienestar de la mascota debe ser prioritario. Evita que el animal sufra por los conflictos de la pareja.
- Recuerda que puedes solicitar asesoría legal: Al igual que con otros aspectos de la separación, contar con asesoramiento jurídico adecuado es esencial para asegurar que tanto tus derechos como el bienestar de tu mascota estén protegidos.
Conclusión
- La separación o divorcio es un proceso difícil para toda la familia, incluidas las mascotas. Con la nueva legislación en vigor, es más sencillo para los jueces tomar decisiones que protejan su bienestar. Si te encuentras en esta situación, no dudes en contactar a un abogado que pueda guiarte a través del proceso para asegurar el mejor resultado posible tanto para ti como para tu querida mascota.