Divorcio contencioso

Si necesitas ayuda con tu divorcio queremos mostrarte las opciones que tienes así como en qué consiste un divorcio contencioso y las diferencias que presenta respecto a un divorcio amistoso o de mutuo acuerdo, a continuación te damos los detalles.

A qué llamamos divorcio

Se llama divorcio a la disolución por la vía legal de un matrimonio y es una respuesta a la solicitud de uno de los cónyuges o de los dos.

Dentro de la ley se contemplan diferentes causas por las que se puede solicitar un divorcio. Van desde el mutuo acuerdo, la infidelidad, el abandono malicioso, la enfermedad mental de un cónyuge que ponga en riesgo la integridad física del otro, abuso, falta de compromiso, etc.

Divorcio contencioso y de mutuo acuerdo: diferencias

Dentro de las disoluciones legales del matrimonio hay diferentes tipos: puede ser de mutuo acuerdo o por lo contencioso.

Es importante conocer las diferencias entre ambos porque, aunque el objetivo final es el de la disolución de la unión, el tiempo que se tarda, la documentación que se necesita, etc no es la misma.

Documentación que se necesita

Independientemente del tipo de divorcio que se quiere iniciar, se requiere una serie de documentación. Es el caso del certificado de matrimonio y el de nacimiento de los hijos en común.

Si se tenía un régimen de bienes gananciales y también se solicita la disolución de dicho régimen también habrá que aportar otro tipo de documentación adicional.

Entre ellas están las nóminas, los posibles contratos de trabajo, si hay algún contrato de alquiler, escrituras del patrimonio, los préstamos y documentación que acredite los gastos derivados de los hijos como puede ser el de su colegio.

Requiere un procedimiento diferente

No se necesita el mismo procedimiento para llevar a cabo un divorcio por lo contencioso que de mutuo acuerdo.

En el divorcio de mutuo acuerdo son los dos los que suelen ir al mismo abogado para que se firme el documento en el que se explican los acuerdos alcanzados por ambas partes. Aquí se incluyen temas nucleares como la custodia de los niños y su calendario de visitas, el uso del domicilio familiar, el reparto de bienes, etc.

Se redacta así una demanda de divorcio amistoso a la que se incluirá dicho convenio regulador así como el certificado de nacimientos de los hijos en caso de que tengan y de matrimonio.

Una vez se admite a trámite la demanda, se llama a ambas partes para que den un poder al procurador y así se ratifique lo acordado previamente. El fin aquí es asegurar que ambos siguen de acuerdo y que no se han producido discrepancias al respecto que puedan derivar en problemas posteriores.

Cuando hay menores, el expediente pasa al ministerio fiscal que estudiará si se ha incluido alguna cláusula en el convenio que puede perjudicar al menor. Una vez todo esto se ha estudiado ya se dicta la sentencia y se da al procurador.

En el caso del divorcio contencioso el procedimiento que se sigue es otro. Aquí una de las partes va a un abogado que se encarga de estudiar el caso para así pedir la documentación que considere necesaria.

Con la ayuda ya de los documentos que se aporten así como lo que busque su cliente, el abogado tendrá que redactar la demanda. Cuando sea admitida a trámite, será la parte interesada la que tendrá que ir al juzgado para dar un poder al procurador.

Tras eso se le hará llegar a la otra parte una copia de la demanda de divorcio. Se abre aquí un periodo de veinte días para que pueda contestar a dicha demanda a través de su propio abogado. Una vez se haya contestado a la demanda de divorcio por la otra parte ya se establecerá la fecha de inicio de juicio.

Cuando ya se ha celebrado el juicio, se dictará una sentencia en primera instancia, que sí podrá ser recurrida.

Tiempo

Como avanzamos, el tiempo que lleva obtener un divorcio si se va por lo contencioso no es el mismo que si se opta por la vía amistosa..

También debes tener en cuenta que la obtención de la sentencia dependerá de la carga de trabajo que tenga el juzgado. Por ello, en los divorcios por lo contencioso el plazo puede variar sustancialmente.

El plazo de los divorcios amistosos suele girar entre un mes y medio y tres meses. Esto dependerá de si tiene hijos o no. En el caso de los divorcios contenciosos pasan entre cinco y ocho meses hasta que se obtiene una sentencia en primera instancia.

Precio

El procedimiento entre un divorcio normal y uno contencioso es diferente y también su precio. Esto es así porque un divorcio amistoso requiere menos trámites  y más sencillos de lo que requiere un divorcio por lo contencioso.

Además en el caso de los divorcios amistosos se comparten figuras como la del abogado y el procurador. Por lo que también se pueden repartir los honorarios entre ambos.

No obstante, el precio también puede variar bastante de un despacho de abogados a otro, por lo que te recomendamos solicitar tu presupuesto personalizado gratis para que puedas valorar opción más adecuada en defensa de tus intereses.

En conclusión

Ahora que conoces en qué se diferencia un divorcio de mutuo acuerdo y un divorcio por lo contencioso y ver el procedimiento que se ha de seguir en cada uno de los casos, así como el coste y el tiempo que llevará obtenerlo en cada uno de los supuestos debes analizar qué opción te puede encajar más.

Por lo general, se suele recomendar siempre llegar a un acuerdo previo entre ambas partes. Para luego acabar de perfilarlo si es necesario con la ayuda de un profesional.

Esto es para así evitar llegar a un procedimiento por la vía de lo contencioso que suele ser más largo y costoso. Pero si no hay acuerdo entre ambas partes es el camino que se debe seguir con la ayuda de un abogado.

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