Delito flagrante: ¿Qué es y cómo lo puedes recurrir?

El concepto de delito flagrante es capital en derecho penal para entender si una detención está justificada o no. Aquí se indican los supuestos que se tienen que dar y cómo recurrir esta decisión.

Qué es un delito flagrante y posibilidades de recurrir una detención

Los delitos flagrantes son aquellos que se están cometiendo en el momento de la detención. En este caso, es deber de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad practicar la detención, sea quien sea el reo. De hecho, la inmunidad parlamentaria no se aplica cuando la persona está cometiendo un delito flagrante.

Los delitos flagrantes constituyen una casuística distinta, puesto que permiten la toma de decisiones excepcionales. Precisamente, ese carácter de excepcionalidad es el que puede generar determinados conflictos legales y de derechos.

Cómo se regulan los delitos flagrantes y quién puede detener

La regulación está definida en la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECr) en su artículo 795. Por otra parte, el artículo 492 establece la obligatoriedad de la policía de detener a quien se considere que está cometiendo un delito en ese momento o lo acaba de cometer.  Eso sí, conviene decir que un particular también podría estar facultado para practicar una detención en estos casos. ( Oscar puedes confirmar esto porfa?)

Por otra parte, hay que señalar que esta normativa no sólo se aplica al momento de la comisión del delito. Si hay una sospecha fundada y evidente de que una persona acaba de cometer un delito y está en el lugar del crimen, o tiene los medios con los que se ha perpetrado la ilegalidad, también podría practicarse la detención. Esto es relevante porque se amplía la interpretación de este tipo de detenciones.

Sin embargo, es indudable que la legislación tiene lagunas y se abre a los excesos policiales. La consideración legal es ambigua y, en algunos casos, esto puede invalidar todo el procedimiento. Una detención ilegal vicia de principio un caso penal.

Recurso ante una detención

Estas detenciones pueden ser interpretables, así que lo primero que hay que hacer es reclamar el derecho de habeas corpus. ¿Qué significa esto? Que un detenido puede exigir ser puesto a disposición judicial de inmediato sin más dilación.

Este derecho está consagrado en el artículo 17.4 de la Constitución Española. La Ley Orgánica 6/1984 de 24 de mayo permite solicitar este derecho y a que un juez, en un máximo de 24 horas, resuelva sobre la detención. Este proceso puede ser iniciado por el detenido, pero también por su abogado, los padres, hijos, cónyuges o hermanos.

El juez tendrá que resolver si inicia un procedimiento penal y toma medidas cautelares o si, en cambio, libera al detenido porque no hay caso. Esta es una pauta importante y tiene una razón de ser eminentemente garantista de derechos.

Conclusión

El derecho penal es muy complejo y, por ese motivo, ante estos casos es importante contar con profesionales cualificados. La firma Le Morne está especializada en proporcionar un servicio de asesoramiento, asistencia al detenido y representación legal.

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